miércoles, 10 de diciembre de 2008

Herencia Política: Desafección juvenil

La percepción juvenil sobre la política ha cambiado en los últimos 30 años. El desinterés por parte de los jóvenes respecto de la política, por los malos líderes o la pérdida de credibilidad en los partidos políticos. En todos los casos son razones por las que ellos se desinteresan, algunos por ignorancia y otros porque dejaron de confiar.

Si bien en los registros electorales se muestra la apatía de los jóvenes hacia el sistema, los candidatos a concejal y alcalde no dicen lo mismo. “Es una pena que no haya mayoría juvenil en la política. Gladis Marín fue disuada a los 25 años y antes de la dictadura, era común que los jóvenes participaran en política. Ahora no quieren, porque está tan fome y desgastada. Pero yo me siento comprometida y capaz, al igual que otros candidatos que se encuentran en mi situación” dice Natalia Sobrazo vestida con un overol naranjo, símbolo de que su campaña quiere barrer con los otros candidatos. Tiene una sonrisa apacible pero esperanzadora. A sus 23 años es candidata a alcaldesa de Ñuñoa, la más joven de Chile. Corre por el Pacto Juntos Podemos. Estudió en dos de los colegios más renombrados de Ñuñoa: el Liceo Experimental Manuel de Salas y el Liceo Eduardo Frei Montalvo. Se tituló de comunicadora audiovisual en el Instituto Arcos, en el que formó el primer centro de alumnos relacionado con el Juntos Podemos, el mismo que el año pasado la nombró encargada de la secretaría juvenil. Natalia pertenece al grupo de jóvenes que tienen cargos tienen relevantes cargos políticos, pero esa tendencia está en baja. Las encuestas en América Latina muestran que la juventud percibe al sistema de partidos políticos como alejados de sus demandas e incomprometidos por una mayor igualdad.

Testimonio

Felipe Goretta es un ejemplo de desencanto. Estudia Derecho y es ex militante de Chile Primero y comenzó a inmiscuirse en la política a los 18 años. Define a sus pares como creativos, pero le cuesta entender el porqué de la marginación política de chicos en los partidos, a sabiendas que la juventud es el porcentaje mayoritario que no está inscrito en partidos políticos ni en los registros electorales. “Los jóvenes tienen miedo del sistema político corroído. La imagen que Chile Primero trató de cambiar esa imagen, pero al final, actuó como cualquier otro partido. Nos usaron para crear una imagen y se nos prometió que nuestras ideas tendrían espacio, lo tuvimos, pero sólo por una mera propaganda política. La palabra de nosotros siempre se va a ver disminuida en las instituciones” cuenta Felipe. Él es de la idea de que el nicho que todos los partidos políticos debieran rescatar es el de la juventud.María José Luarte, cientista política de la Universidad del Desarrollo piensa que “los jóvenes ya están aburridos de tener una política concertacionista hace 16 años. Escuchan los mismos discursos año tras año, y en vez de tener una oposición fuerte, sólo cumple el rol de aportillar los proyectos sin dar soluciones efectivas”. Para esta cientista los jóvenes son “carne fresca” y una buena iniciativa para la política, pero carecen de espacio en ella por el pánico civil al cambio. Por el apego a lo tradicional.

Cifras

El Instituto Libertad y Desarrollo demostró a través de un estudio de este año, que existe una crisis de credibilidad por parte de los jóvenes chilenos respecto de las instituciones tradicionales especialmente por el aumento de casos de corrupción. También les cuesta conceptuar que el voto puede llegar a ser un instrumento real de cambio. Tomando en cuenta estadísticas del Servicio Electoral, en 1988 los inscritos eran 2,5 millones. En 1996 la cifra disminuyó a 1 millón 800 mil. En el 2004 eran 700 mil y actualmente la cifra no supera los 500 mil.El desarrollo y motivación para la participación se une también con el fomento de la educación cívica. El problema según María José es que en Chile la educación es más instructiva que formativa, por lo que más que hacer que se entienda el funcionamiento político, sólo enseña cómo votar, pero no la importancia de involucrarse con el gobierno. “Sufragamos sin entender nada, y ese es un vacío que existe en el país”. Todo esto se refleja en las cifras; Chile es un país con escasa participación política en relación al mundo a Iberoamérica, sólo el 7% de los jóvenes entre 18 y 24 años es votante según la Organización Iberoamericana de Juventud. DBF

No hay comentarios: